Las estadísticas varían pero el hecho es que al menos la mitad de los asesinatos del país no son por cuenta de guerrillas y paramilitares. Hoy la violencia es mayor en las ciudades (cerca del 70% de los colombianos viven en ellas) y se debe a problemas intrafamiliares, la delincuencia común, la justicia privada y los magnicidios cuando no a la simple eliminación del que piensa diferente; y habría que agregar los muertos en accidentes de transito debidos a una "zoociedad" que sube los carros a los andenes y camina por las calzadas ante la indiferencia de las autoridades. Esta criminalidad urbana, a la que hay que sumar otras formas de violencia como el ruido, la mugre, la intolerancia y el irrespeto de los derechos de los otros, es alimentada por la falta de espacios urbanos adecuados y de ciudadanos urbanizados. Somos una población campesina, a la que no se le ha enseñado a habitar en ciudades, que ocupa conglomerados, a veces enormes, que no ciudades, pues la trivializació...