La naturaleza es lo primero a pensar en las propuestas para el mundo, los países y sus ciudades; ver cómo pueden contribuir a evitar el cambio climático, la disminución de la biodiversidad, la contaminación del aire y el agua, y la destrucción de bosques y selvas, y lograr su reforestación. Dejar de usar combustibles de origen fósil y pasar a energías limpias; reutilizar las aguas servidas; evitar las basuras y desperdicios; y reutilizar todo lo que se pueda. La guerra hay que combatirla a fondo y públicamente por todos los medios al alcance de cada país y de cada ciudadano; hay que lograr la total prohibición de las armas de extinción masiva, que las fábricas de armamento convencional se dediquen a producir herramientas para la vida. Y respecto a las guerras internas hay que dejar de lado las polarizaciones y llegar sin populismos ni mentiras a verdaderos acuerdos de paz que se puedan concluir. La inseguridad no sólo es un tema de más y mejor policía, incluyendo policías municip...