Se habla mucho de la injusticia grande, que es lo que significa iniquidad (inequidad no existe, y equidad es justicia natural, por oposición a la letra de la ley positiva; o sea, nada que ver ). Pero se habla pensando apenas en los grandes latifundios del campo, pero no también de la propiedad privada del suelo urbano y urbanizable (conveniente o no), cuyo negocio especulativo ha sido nefasto para el buen crecimiento de nuestras ciudades, pese a que la gran mayoría de colombianos ahora habitamos en ellas. Y tampoco se habla suficiente de la propiedad privada de los bancos, cuyas perdidas se “socializan” para que las paguemos todos, ni de la propiedad monopolista de ciertas industrias, ni de las multinacionales del comercio que nos llevan a comprar lo que no necesitamos con el dinero que no tenemos. Justo al contrario de hace poco mas de medio siglo cuando Tirofijo se ...