Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando las entradas etiquetadas como escritura

¿Año nuevo? 01.01.2025

                 Desde luego las amenazas continuarán en este nuevo año, y ni para que recordarlas, pero sí toca mencionar que preocupa que la ONU haya denominado el 2025 como el Año Internacional de la Paz y la Confianza, lo que hace que se desconfíe más de dicho organismo, justo cuando el mundo está al borde de avances tecnológicos que transformaran industrias, economías, sociedades y países, y habrá cada vez menos diferencia entre ciencia ficción y realidad; y entonces toca añadir que la ignorancia y el mal uso de la IA son dos amenazas más, y que la democracia está cada vez más amenazada en más partes y de diversas maneras.               Pero pese a todo lo que se viene encima, es más que conveniente pensar en qué hacer y cómo, para que el 2025 sea un año mucho más interesante y placentero que el anterior Y sin duda lo sería leyendo, estudiando,...

Palabras. 24.04.2008

Sugerente y bello el titulo del libro que recoge diez años de opinión en prensa de Francisco José Lloreda Mera. Podría ser el primero de una colección, Palabras Usadas, que El País publique para navidad con las columnas de sus colaboradores que ya pasen de las quinientas. Sería la mejor manera de que tantas palabras se sigan usando. Las de esta columna, por ejemplo, que a la larga también se deben a Kiko, quien invitó a su autor a escribirla, y que pronto, si El País insiste en quererlo, llegará a las quinientas entregas, han alimentado uno ya casi listo. Será una introducción a la arquitectura en el trópico hispanoamericano que publicará editorSPatiño . Y por supuesto han preñado otro sobre los problemas urbanos de Cali a principios del siglo XXI, que en justicia deberían financiar sus diferentes alcaldes y lideres cívicos, como un anti elogio a su ceguera pues, desde luego, aunque no escuchadas, las de ¿Ciudad? no han sido palabras necias: c omo lo escribió Nicolás Gómez Dávila,...

Otra queja. 08.11.2001

Dice el famoso columnista inglés Paul Johnson ( Al diablo con Picasso , 1997) que en las columnas de opinión no se deben tratar intimidades ni problemas personales y que solo muy de vez en cuando es pertinente decir algunas cosas del autor. Sin embargo a veces sí que es necesario decir algo de las columnas.           No suelo comprobar lo que sale en el periódico con lo que mando, aunque siempre miro por encima lo publicado y a veces hasta lo leo. Pero el jueves pasado saltaba a la vista que mis cuatro sólidos párrafos habían sido convertidos en doce parrafitos y, leyendo detenidamente, encontré que además eliminaron unas comas y pusieron otras. No fue un problema de transcripción pues las columnas las mando por e-mail. No creo que lo hicieran para llenar espacio pues mi escrito era similar en extensión a los que siempre mando. En otra ocasión, hablando de la suerte de Bogotá de haber tenido tres buenos alcaldes consecutivos, me quitaron ...