Ya en la tercera década del XXI, la mayoría de las fachadas urbanas a lo largo de las calles y avenidas de Cali y alrededor de sus plazas y parques, son feas debido a sus diferencias de alturas y paramentos, las culatas que generan, y la caprichosa irregularidad de sus ritmos y colores. Junto al desorden y precariedad de sus andenes; la proliferación de avisos, propagandas y pintadas; las redes de energía y comunicaciones y los postes que las sostienen; y las grandes vallas aéreas que invaden el paisaje y el cielo. En pocas palabras, y siguiendo la definición de belleza del DLE, en general esta ciudad no complace a la vista y por extensión al espíritu, y tampoco al oído pues es muy ruidosa. Y continuando con el DEL, ahora respecto al significado de lo feo, debería ser evidente que la gran mayoría de las calles de Cali están desprovistas de belleza y hermosura, o son de aspecto malo o desfavorable, lo qu...