En su discurso de aceptación del Premio Nobel de Literatura de 1990, Octavio Paz decía que la búsqueda de la modernidad llevó a los mejicanos a descubrir su antigüedad, y ha constatar que había un puente entre ellas. “Aisladas, las tradiciones se petrifican y las modernidades se volatilizan; en conjunción, una anima a la otra y la otra le responde dándole peso y gravedad” (Citado por Fernando Savater: Las ciudades y los escritores , 2013. p. 188). Pero, también pensaba Paz que “nada le gana a uno más animadversiones que haber tenido razón antes que los demás” (p. 176). Y lo que ya es insólito es que se mantengan por encima de la razón ya comprobada. Antes las ciudades y su arquitectura en general cambiaban muy poco a lo largo de siglos, pero hoy lo hacen mucho en pocas décadas. En Cali, el puente entre los pocos edificios antiguos que había a princi...