μηδεν αγαν (nada en exceso) advierte el Oráculo en el templo de Apolo en Delfos (s. IV a.EC., levantado por Trofonio y Agamedes ), p luralitas non est ponenda sine necessitate (la pluralidad no se debe postular sin necesidad) advertía William of Ockham (c. 1280/1288 – 1349), y el príncipe de Talleyrand ( 1754 - 1838 ) pensaba que toda exageración resulta insignificante. De nada mucho le recordaba su papá al arquitecto Carlos Campuzano, director durante 16 años del Taller Internacional de Arquitectura que realiza la Universidad de Los Andes cada Julio en Cartagena desde 1986. Y la verdad es que hay mucho que aprender en las muchas posibilidades de este laboratorio…pero hay que evitar los excesos para no caer en lo insignificante, eludiendo lo formulado sin necesidad. Los excesos en Cartagena, precisamente, abundan en Bocagrande, como a veces ...