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“Parque de ensueño” 13.10.2016


            Así lo bautizó El País (06/09/2016) pero en realidad la anunciada megaobra que busca recuperar el río Cali solo ayudará a que se olvide que el problema está es aguas arriba. Además de que pensaban intervenir en el CAM, cubriendo absurdamente con tierra sus plazoletas y haciendo insólitas playas de arena en el río, lo del trancón a  la altura de la Clínica de los Remedios y el encajonamiento del río hasta el Club Colombia, es una pesadilla, pagada con el dinero de los contribuyentes, obra que en el futuro tendrá que ser demolida y reconstruida la avenida, principiando por hacer primero andenes decentes al otro lado de la calle y en la otra ribera del río lo que no contempla el proyecto actual.
            Por lo demás este proyecto no cuenta con la aprobación por parte del Consejo Departamental de Patrimonio Cultural, como es lo procedente pues está en el área de influencia del Centro Histórico de Cali y de bienes de interés cultural, BIC, de nivel nacional. Y ha  debido ser un concurso público y no entregado a dedo a una oficina extranjera con la disculpa de que sería pagado por la empresa privada. Y por lo demás ya existían dos proyectos anteriores para un parque lineal del río Cali, sufragados por los contribuyentes, y realizados por arquitectos caleños pero que no se consideraron para nada, cuando lo indicado hubiera sido estudiarlos y, si fuera lo indicado, actualizarlos.
            El río Cali lo que necesita es un plan integral, realizado por un equipo interdisciplinario, para la recuperación de todo su cauce, desde su nacimiento hasta su desembocadura en el Cauca, pues no se trata de apenas un parque mas, y lo mismo con El Aguacatal, su principal afluente y contaminador, pues son fuentes principales de agua dulce para abastecer a los acueductos de Cali; y ríos que son parte importante, con los cerros y la cordillera, de su paisaje urbano. Hecho este plan si se podría derivar un proyecto para su paso por la ciudad, desde antes del Zoológico hasta el Cauca, el que por supuesto, hay que insistir, debe ser un concurso, ahí sí, de diseño urbano.
            Pero lo que anuncian tan alegremente en la prensa será todo un despropósito en la Avenida 2 Norte, y no apenas la innecesaria remodelación de la Plazoleta del Correo, pagada por los contribuyentes, y además equivocada pues los suelos oscuros de ladrillo no son lo indicado para un ambiente urbano mas fresco al reflejar la radiación solar, como ya lo explicó Steven Chu, Nobel de Física y ex Secretario de Energía de EE. UU. (The Economist, 04/07/2009). Así del sueño atravesado por un río los caleños despertarán con una pesadilla mas, sumada a la inseguridad, la torpe destrucción del patrimonio construido, los problemas del MIO, el caos del Centro y la inmovilidad en el sur, la que aumentará con las viviendas que se siguen autorizando mas allá de Jamundí por que no están en Cali.
            El río Cali, el río de la ciudad, como se lo llamó en la Colonia, nace en el Alto del Buey en los Farallones. Su cuenca ocupa 11.920 ha del noroccidente del municipio y recorre 50 km en la dirección oeste-noreste hasta el Cauca. Entre sus afluentes se destacan los ríos Pichindé, Florida, Aguacatal y Cabuyal. Su cuenca es boscosa y más del 50% es parte del Parque Nacional Natural de los Farallones de Cali, que se extiende por varios corregimientos que no tienen plantas de tratamiento de aguas residuales y vierten sus aguas contaminadas directamente al río o sus afluentes, aguas que abastecen la Planta Río Cali del acueducto de Cali.

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