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Circulación y ciudad. 24.11.2011

Como lo anotó en El País el ingeniero Carlos Gonzáles, los candidatos a la alcaldía poco saben al respecto, y desconocemos con que saldrá la próxima administración. Circulación, del latín circulatĭo, -ōnis; es la acción de circular por las vías públicas, y por antonomasia, la de los automóviles. Movilidad, como se ha dado en decir, del latín, mobilĭtas, -ātis, es apenas la cualidad de movible. Como los carros, taxis, ambulancias, camiones, buses, motos, bicicletas y peatones de esta ciudad en la que muchos no sabe circular ni hay normas ni condiciones adecuadas para hacerlo bien; y creemos que usando (mal) nuevas palabras lo solucionaremos.
          El pico y placa ha generado que haya mas carros pues las familias que antes tenían dos ahora tienen tres, que se vendan mas vehículos nuevos y que los de segunda sean muy baratos; y para los demás ha resultado costoso. Habría que racionalizar y desestimular el uso de los carros, no prohibirlo, en ciertas vías y sectores. Pero la solución real es que se pueda caminar mas, usar bicicleta y el transporte público, carros mas pequeños y que se compartan,  que haya mas semáforos y estén sincronizados, y horarios de trabajo, estudio y comercio escalonados. Lo de las motos hay que estudiarlo a fondo pues las tendremos para largo tiempo y cada vez mas.
          Con respecto a la Autopista del Bicentenario, todo dependería de su correcto diseño, como se ha insistido en esta columna, el que debe ser de tal manera que no incremente la barrera urbana que actualmente es el corredor férreo, que parte en dos la Cali actual, y que sea uno de los componentes de un completo eje de transporte multimodal de Yumbo a Jamundí. El objetivo primordial de lo que se haga allí debería ser la unión peatonal y vehicular Este-Oeste de la ciudad y no apenas la Norte-Sur solamente vehicular. Por lo tanto se trata, mas que de una simple vía, es de un problema complejo de cruces a dos niveles que no sean apenas para los carros.
          Al contrario de lo que torpemente se viene haciendo desde los Panamericanos de 1971, hay que pensar primero en los peatones. Los carros son los que tienen que subir y bajar, lo que implica que la autopista tendría que ir por debajo o por encima del plano base urbano, y que las  avenidas transversales existentes, “pasen” la ciudad  al otro lado del corredor férreo por puentes o túneles (con iluminación cenital), dependiendo de la topografía, suficientemente largos para disminuir su pendiente, y con amplios andenes por los cuales se accedería a las estaciones del tren ligero que estarían debajo o arriba de ellos, lo que les daría animación y seguridad.
          La circulación en una ciudad reclama mas que vías. Tiene que ver con su tamaño, densidad, usos y  transporte colectivo, y que se entienda que sus andenes, y lo que en ellos pasa, son lo mas importante de sus calles. Y como en Cali el negocio especulativo del suelo urbano la extendió innecesariamente, hay que consolidar subcentros, eliminar la zonificación a gran escala y estimular la vivienda en todas partes. Aquí casi toda la educación y las nuevas viviendas al sur, la industria al norte, y se atomizó el centro tradicional en centros comerciales que lastimosamente se dejaron hacer en cualquier parte y a manera de guetos.

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