Ir al contenido principal

Decidamos. 05.01.2012


            Salvo un desastre nuclear, provocado o accidental, cada vez más posible, hoy dependemos es del control del crecimiento demográfico, pues estamos agotando los recursos no renovables, y haciendo que las crisis económicas sean globales y las ciudades inevitables (Scientific American, 11/2011). En ellas sucede casi todo lo que pasa, y mas de la mitad de lo que se produce en el campo es para la subsistencia de sus habitantes. Sin ellas mas de la mitad de los siete mil millones que ya somos -mil mas en la última década y casi todos en ciudades de paises pobres- simplemente no tendríamos en donde habitar pues ya no cabemos todos en el campo.
       Pero las ciudades son responsables de la casi totalidad de los gases de efecto invernadero, debido a sus carros, industrias y, principalmente, sus edificios, los que consumen la mitad o mas de la energía eléctrica, producida mayoritariamente por combustibles fósiles, para su climatización e iluminación. Incluso en las nuestras, pues aunque afortunadamente dependemos es de hidroeléctricas, podrían ser naturales por sus climas benignos y casi doce horas diarias de sol durante todo el año. Pero su crecimiento ha llevado al despilfarro de luz eléctrica y agua potable, de la mano de modas impuestas por los paises desarrollados y con estaciones.
       La globalización también ha sido dañina para las ciudades de nuestros paises, pues ha llevado al olvido de sus tradiciones urbano arquitectónicas regionales, y son cada vez mas parecidas entre si debido a la vulgarización comercial y masiva de la arquitectura moderna durante la segunda mitad del siglo XX, y ahora a la arquitectura espectáculo de moda. Brasilia es una excepción y sectores como el Centro Internacional de Bogotá también. Pero lamentablemente ciudades como Cali son colchas de retazos, feas y descocidas por lo demás, debido a su rapidísimo crecimiento y evolución sin casi ninguna planificación efectiva en la práctica.
       De otro lado, en las ciudades la gente se reproduce menos y se produce y divulga la cultura y el pensamiento científico que nos puede salvar. La evolución de las ideologías, un hecho puramente urbano, está permitiendo la superación de prejuicios ancestrales o fundamentalistas y la globalización de la información,  como lo demandaba Christopher Hitchens (Hitch-22, 2010). Es un factor determinante para el auto control del crecimiento de la población, y del insipiente cambio de los comportamientos de la gente con respecto a la urgente conservación de la naturaleza y el medio ambiente, y la búsqueda de una calidad de vida mejor entendida, aquí y ahora.
        El futuro de las ciudades –y por consiguiente el de la misma humanidad- depende de que la evolución de las ideologías permita controlar su crecimiento descontrolado, como racionalizar sus consumos, situaciones que las afectan cada ves mas. Hay que analizar su presente como el de sus regiones y aprender de su pasado procurando su sostenibilidad. Como se comprueba con la evolución de otras especies, entre mayor sea la cantidad de individuos, mas posibilidades hay de que subsistan, pero si se agotan los recursos no renovables de su entorno colapsan. Es el caso de la especie humana pues los estamos consumiendo o destruyendo aceleradamente.


Comentarios

Entradas populares de este blog

Pasos pompeyanos. 05.02.2015

          Ya los romanos los usaban, como en Pompeya, de donde toman su nombre, para cruzar sus calles sin mancharse con la inmundicia y el barro . Pero ahora y aquí, el que se ha dicho que se hará al final del Paseo Bolívar definitivamente es un paso adelante en esta ciudad sin andenes por donde pasear y ni siquiera caminar. Decir que un semáforo allí causará trancones viales es exagerado aunque por supuesto no existirían nunca si estuviera unido con el anterior y el siguiente, generando por la Avenida 2º Norte una “ola verde”, es decir una serie de semáforos coordinados para permitir el flujo continuo del tránsito rodado sobre varias intersecciones en una misma dirección . Pero mejor seria el hundimiento de la Avenida desde el edificio Las Ceibas hasta el Conservatorio, y prolongar el puente peatonal del CAM hasta donde hoy está la Plazoleta de la caleñidad, ya propuestos por Sara María Giraldo, Heinz von Halle y el autor de esta co...

El estado de la cuestión. 21.02.2024

 Se trata de la base teórica sobre la que se sustenta un escrito, o que se rebate en su desarrollo posterior, y que forma parte del mismo. Pero si bien es lo ético en una columna de opinión, debería ser obligatorio en toda propuesta para la ciudad, lo que no suele suceder en Cali en donde cada cuatro años cada nuevo Gobierno Municipal simplemente ignora las propuestas de los anteriores e improvisa otras. Es lo que ahora hay que evitar en el caso del interés actual por el Centro de la ciudad o la propuesta para el Tren de cercanías, la que primero que todo se debería sustentar en la conformación del Área Metropolitana de la ciudad a partir de la que de hecho ya existe. El Área Metropolitana es la que engloba una ciudad principal (la metrópolis) que le da su nombre, y una serie de ciudades dormitorio, industriales, comerciales o de servicios (Wikipedia). Por eso la de Cali no se debe confundir con la región de ciudades del valle alto del rio Cauca, que se extiende de la Virginia a Sa...

Viaje a la arquitectura

  Recorriendo su bello país de la mano de José Saramago (Azinhaga, Portugal 1922-2010 Tías, Las Palmas, España, Premio Nobel de Literatura de 1989) de octubre de 1979 a julio de 1980, es muy grato encontrar a lo largo de Viaje a Portugal, 2022, más de 726 páginas de comidas, bebidas, gentes, paisajes, plazas y parques. Y capillas, iglesias, palacios, castillos y murallas -17 declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco- la gran mayoría muy interesantes para entender, con las palabras de Saramago, en qué consiste lo emocionante que pueden ser, y por qué “la utilidad no es incompatible con la belleza” (p. 450) y que “la arquitectura, sólo por sí, puede hacer feliz a un hombre” (p. 439). Escribiendo sobre la iglesia del Senhor Bom Jesus, en Matosinhos, dice Saramago que su arquitecto, Nicolau Nasoni (San Giovani, Valdarno, Italia 1691-1773 Oporto, Portugal) supo “entender los misterios del granito lusitano, darles espacio para llegar mejor a los ojos, alternando lo oscuro de la...