Ir al contenido principal

Cordura. 13.05.2020


    Nada en exceso” advierte el Oráculo de Delfos ya desde el Siglo IV a.e.c. o, como sencillamente lo decían los antiguos, In Medio Stat Virtus. Es lo que habría que entender en estos días en el sentido de buscar una disposición del ánimo que mueva a tratar a cada uno con moderación y como lo merece, y movidos por el sentimiento del deber o de la conciencia en lugar de por las prescripciones de la ley, privilegiando la justicia natural en oposición a la letra de la ley positiva, y con mucha mayor razón si los cambios a ésta tienen que ser improvisados a última hora como ha sucedido ahora. “¿Para qué sirven las canas”, se pregunta Humberto de la Calle (El Espectador 11/05/2020).

     Ricardo Villaveces en su columna de El País del 08/05/2020, aludiendo a la ‘detención domiciliaria’ a que han sometido a los mayores de 70 años, independientemente de su salud, nos recordó lo dicho por Angela Merkel: “Encerrar a nuestros mayores como estrategia de salida a la normalidad es inaceptable desde el punto de vista ético y moral”, y sin duda es inicuo como se afirmó en mi columna de Caliescribe.com del 09/05/2020, es decir, contrario a la equidad e injusto, y hasta malvado dice el DEL, pero sí es irrespetuoso como sin duda lo es al referirse a ellos como “abuelitos”, esos adultos mayores que son degradados de “mariposa a oruga” al decir de Daniel Samper Pizano (RCN, 11/05/2020).

    Pero además esas personas mayores pero sanas son inocuas; no hacen daño. Y como afirma el Dr. Carlos E. Climent en El País 10/05/2020, en donde hablando de impacto emocional de la pandemia opina que “los mayores de 70 años sanos, autónomos y activos no son el problema [y] no van a colapsar las unidades de cuidado intensivo de los hospitales porque son los que mejor se saben cuidar”. Además, aunque no sobra advertir que los que tienen problemas de salud deben permanecer en sus casas, sí que debe preocupar igualmente la salud mental de los que están sanos, al encerrarlos obligatoriamente sin permitirles decidir a dejarse guiar o no pero desde luego sin perjudicar a los demás.

      Daniel Samper Pizano ya escribió en ‘La jaula de los abuelos’ que hace años suscribió un papel en el que exige una muerte digna y su rechazo a innecesarios paliativos, y que está dispuesto a firmar también su renuncia a un cupo en la UCI a cambio de que le reconozcan sin demora los derechos de los demás ciudadanos, y que “prefiere menos vida con más vida en vez de más vida con menos vida” y aquí y en otras partes cada vez más personas están de acuerdo. Como en Argentina, en donde los adultos mayores ya se han rebelado frente a las medidas ‘gerontofóbicas’ de control por la pandemia (RT,17/04/2020) y está el ejemplo de Suecia que hay que analizar (Semana 10/05/2020).

   Cordura, sensatez y templanza en las palabras o acciones es lo que se precisa; como escribe el doctor Climent: “Para el manejo de la crisis actual es preciso que todos […] hagamos un esfuerzo para centrarnos en lo que sirve para mitigar el sufrimiento transmitiendo mensajes positivos, constructivos y bien documentados”. Y ya Antonio Caballero advirtió en Semana (28/03/2020) sobre la tentación totalitaria: “Todo el que puede da instrucciones sobre lo que hay que hacer frente a la pandemia del coronavirus.” Y algunos funcionarios en Colombia incluso han aprovechado para pretender hacer cambios extemporáneos y en contra de las instituciones, y al que le caiga el guante que se lo chante.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Pasos pompeyanos. 05.02.2015

          Ya los romanos los usaban, como en Pompeya, de donde toman su nombre, para cruzar sus calles sin mancharse con la inmundicia y el barro . Pero ahora y aquí, el que se ha dicho que se hará al final del Paseo Bolívar definitivamente es un paso adelante en esta ciudad sin andenes por donde pasear y ni siquiera caminar. Decir que un semáforo allí causará trancones viales es exagerado aunque por supuesto no existirían nunca si estuviera unido con el anterior y el siguiente, generando por la Avenida 2º Norte una “ola verde”, es decir una serie de semáforos coordinados para permitir el flujo continuo del tránsito rodado sobre varias intersecciones en una misma dirección . Pero mejor seria el hundimiento de la Avenida desde el edificio Las Ceibas hasta el Conservatorio, y prolongar el puente peatonal del CAM hasta donde hoy está la Plazoleta de la caleñidad, ya propuestos por Sara María Giraldo, Heinz von Halle y el autor de esta co...

El estado de la cuestión. 21.02.2024

 Se trata de la base teórica sobre la que se sustenta un escrito, o que se rebate en su desarrollo posterior, y que forma parte del mismo. Pero si bien es lo ético en una columna de opinión, debería ser obligatorio en toda propuesta para la ciudad, lo que no suele suceder en Cali en donde cada cuatro años cada nuevo Gobierno Municipal simplemente ignora las propuestas de los anteriores e improvisa otras. Es lo que ahora hay que evitar en el caso del interés actual por el Centro de la ciudad o la propuesta para el Tren de cercanías, la que primero que todo se debería sustentar en la conformación del Área Metropolitana de la ciudad a partir de la que de hecho ya existe. El Área Metropolitana es la que engloba una ciudad principal (la metrópolis) que le da su nombre, y una serie de ciudades dormitorio, industriales, comerciales o de servicios (Wikipedia). Por eso la de Cali no se debe confundir con la región de ciudades del valle alto del rio Cauca, que se extiende de la Virginia a Sa...

‘La mansión’. 01.07.2020

Los ‘tiempos gloriosos’ de la casa solariega de la aristocrática familia Von Dranitz en el Este de Alemania antes de la Segunda Guerra Mundial, es como Anne Jacobs subtitula a propósito su novela de 2017, pese a que se desarrolla mucho más en los que no lo fueron para nada durante la guerra y después hasta la reunificación de Alemania en 1989. Largos y diferentes tiempos que sin embargo recuerdan siempre ‘La arquitectura del poder’ (como titula Deyan Sudjic su libro de 2005 sobre este tema) comenzando por la portada de la edición en español de ‘La mansión’ que sin querer queriendo muestra un palacete como símbolo de una heredad en lugar de una gran casa señorial en el campo. Además uno de sus personajes, el joven Kacpar Woronsky, es el retrato de la apasionada relación de todo arquitecto que lo sea de verdad con su oficio/arte y sus clientes/mecenas. Hacia “planos, vistas laterales, la perspectiva delantera de un edificio ultramoderno [y] sus ideas eran originales, a veces alocadas, pe...