Ir al contenido principal

Ciudad. 04.09.2024

              Para Sócrates nada enseña, sólo los hombres en la ciudad. En ellas se da una división social: filósofos-gobernantes, guardianes-guerreros y trabajadores-productores, pensaba Platón. Para Aristóteles es la asociación de familias para una vida perfecta y autosuficiente, feliz y bella. Para Séneca las ciudades están a medio camino de ser terminadas cuando se han comenzado bien. Y, como dijo Cicerón, donde quiera que se esté bien, allí está la patria. Por eso para Marco Aurelio, lo que no es bueno para la colmena [la ciudad], no puede serlo para las abejas [los ciudadanos]. De la función, construcción y forma, más emplazamiento, escribió Vitruvius.
              La ciudad es como una casa grande, y la casa una pequeña ciudad, ya lo entendió Leon Battista Alberti. Y como dice José Ortega y Gasset, no es primordialmente un conjunto de casas habitables, sino un espacio para funciones públicas. Es el escenario de la cultura, y, con el idioma, la obra de arte más grande del hombre, prohíja el arte y es arte, anotó Lewis Mumford. Atrae personas inteligentes y permite que colaboren entre sí, señala Edward Glaeser. Para Ben Wilson es el mayor invento de la humanidad. Y, concluye Yuval Noaḥ Harari, cualquier cooperación humana a gran escala en un Estado moderno, parte de la imaginación colectiva.
              Para Italo Calvino las ciudades no son “invisibles”, muestran su  pasado en sus calles; son un conjunto de muchas cosas: memorias, deseos, lenguajes; son lugares de trueque, como explican  los libros de historia, pero estos trueques no lo son sólo de mercancías, son también trueques de palabras, deseos y recuerdos. Para Fernando Savater, las ciudades y los escritores nos sumergen en la cultura de distintos países y rastrean los rincones célebres y secretos que han servido de escenario o inspiración a los autores que han marcado la historia de la literatura universal. Tanto los personajes del Quijote como Cervantes están presentes en cada uno de los rincones de Ciudad Real.
              F. Ll. Wright pensaba para una ciudad más natural, más espaciosidad, luminosidad, apertura y amplitud. Walter Gropius era urbanista además de arquitectoPara Le Corbusier son bloques de apartamentos en espacios ajardinados. El “menos es más” de Mies van der Rohe aplica a las ciudades. Lo superfluo se vuelve feo con el tiempo dijo Alvar Aalto. Para Josep Lluís Sert son la síntesis del paisajismo, planificación y arquitectura. Fernando Távora reinterpretó el tejido urbano original. Eduardo Souto de Moura pensaba que para ciudades sostenibles basta dejar las tonterías. Como dijo José Antonio Coderch las pequeñas crecían como plantas.
              Luís Barragán pensaba que la arquitectura debe respetar los valores culturales y las tradiciones de cada lugar. Salmona ya concebía desde su inicio sus edificios y conjuntos como un hecho urbano, no apenas arquitectónico.  Uno construye una ciudad propia con sus recuerdos, recordaba Germán Téllez. Para Silvia Arango la ciudad es una construcción que se debe, en buena medida, a la conciencia que los arquitectos tengan de ella. En Colombia ya hay desde finales del siglo XX los que hacen una arquitectura regenerativa a partir del entorno urbano y lo que hay en cada lote, y ya existe un premio a la intervención en lo ya construido.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Viaje a la arquitectura

  Recorriendo su bello país de la mano de José Saramago (Azinhaga, Portugal 1922-2010 Tías, Las Palmas, España, Premio Nobel de Literatura de 1989) de octubre de 1979 a julio de 1980, es muy grato encontrar a lo largo de Viaje a Portugal, 2022, más de 726 páginas de comidas, bebidas, gentes, paisajes, plazas y parques. Y capillas, iglesias, palacios, castillos y murallas -17 declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco- la gran mayoría muy interesantes para entender, con las palabras de Saramago, en qué consiste lo emocionante que pueden ser, y por qué “la utilidad no es incompatible con la belleza” (p. 450) y que “la arquitectura, sólo por sí, puede hacer feliz a un hombre” (p. 439). Escribiendo sobre la iglesia del Senhor Bom Jesus, en Matosinhos, dice Saramago que su arquitecto, Nicolau Nasoni (San Giovani, Valdarno, Italia 1691-1773 Oporto, Portugal) supo “entender los misterios del granito lusitano, darles espacio para llegar mejor a los ojos, alternando lo oscuro de la...

El estado de la cuestión. 21.02.2024

 Se trata de la base teórica sobre la que se sustenta un escrito, o que se rebate en su desarrollo posterior, y que forma parte del mismo. Pero si bien es lo ético en una columna de opinión, debería ser obligatorio en toda propuesta para la ciudad, lo que no suele suceder en Cali en donde cada cuatro años cada nuevo Gobierno Municipal simplemente ignora las propuestas de los anteriores e improvisa otras. Es lo que ahora hay que evitar en el caso del interés actual por el Centro de la ciudad o la propuesta para el Tren de cercanías, la que primero que todo se debería sustentar en la conformación del Área Metropolitana de la ciudad a partir de la que de hecho ya existe. El Área Metropolitana es la que engloba una ciudad principal (la metrópolis) que le da su nombre, y una serie de ciudades dormitorio, industriales, comerciales o de servicios (Wikipedia). Por eso la de Cali no se debe confundir con la región de ciudades del valle alto del rio Cauca, que se extiende de la Virginia a Sa...

‘La mansión’. 01.07.2020

Los ‘tiempos gloriosos’ de la casa solariega de la aristocrática familia Von Dranitz en el Este de Alemania antes de la Segunda Guerra Mundial, es como Anne Jacobs subtitula a propósito su novela de 2017, pese a que se desarrolla mucho más en los que no lo fueron para nada durante la guerra y después hasta la reunificación de Alemania en 1989. Largos y diferentes tiempos que sin embargo recuerdan siempre ‘La arquitectura del poder’ (como titula Deyan Sudjic su libro de 2005 sobre este tema) comenzando por la portada de la edición en español de ‘La mansión’ que sin querer queriendo muestra un palacete como símbolo de una heredad en lugar de una gran casa señorial en el campo. Además uno de sus personajes, el joven Kacpar Woronsky, es el retrato de la apasionada relación de todo arquitecto que lo sea de verdad con su oficio/arte y sus clientes/mecenas. Hacia “planos, vistas laterales, la perspectiva delantera de un edificio ultramoderno [y] sus ideas eran originales, a veces alocadas, pe...