Ir al contenido principal

Ahí están. 17.04.2008


El Parque del Acueducto, incluyendo la capilla y colina de San Antonio, pues hay que leerlos como un todo, es sin duda uno de los mas bellos del país. Por su variada topografía, prado parejo, discretos senderos y bancas, su pequeña pero muy bien emplazada y evocadora fuente, su frondosa y variada vegetación y el sol que se cuela entre los árboles. Es tan bueno que los bobadas que le han agregado recientemente, casi no importan. Como unos juegos para niños, tan mal puestos que nadie usa, o las bancas nuevas, tiradas en cualquier parte, que aun no se han robado, como todas las de la Avenida Colombia, y alguna espantosa “vitrina” de publicidad, que no mogador.
          La Torre Mudéjar es la mas bella de América, como dijo Santiago Sebastián, pero aquí pocos se dan cuenta. Cómo adorna de bien la larga y bella fachada urbana de las dos San francisco en la única plaza que tenemos, pues las nuevas del Cam en rigor no lo son. Uno nunca se cansa de mirar sus cuatro cuerpos y su cúpula, y descubrir nuevos e interesantes detalles en todas sus elevaciones. Deberían ser de estudio obligatorio en nuestras escuelas de arquitectura, por pertinentes. Y desde luego queda la Merced y la calle que conforma con la Casa Arzobispal, sin duda el espacio urbano mas bello de la ciudad, y cuyos ecos, aunque maltrechos, aun se viven en San Antonio.
          La Calle de la Escopeta cada vez está mejor y mas animada, y el remate que le proporciona la casa Martínez Satizabal, la mas vieja que queda en Cali, es bello, pero por supuesto hay que saber mirarla. Lastima que el estupendo patio de la sede de la Sociedad Colombiana de Arquitectos se haya cerrado con un muro y no con una reja, como se pensó inicialmente. Pero aun se podrían abrir un par de grandes ventanas al mismo. Y, claro, no faltan los antisociales que insisten en estacionar sus feos carros a la brava entre los bolardos, los que habría que cambiar por la combinación de fuertes multas, grúa y educación ciudadana.
          La Estación Central es nuestro mas bello edificio moderno. Y se podría ver al final de la Avenida de las Américas si algún día un Alcalde, no apenas con corazón sino también con ojos, se gastara unos no muchos pesos eliminando toda la contaminación visual en su gran glorieta de enfrente, que debería mantener solo su fuente, como hace años, y en ampliar y arborizar ordenadamente sus andenes y eliminar su entrometido separador. Cali quedaría así con una verdadera avenida, que no tiene, pero también habría que demoler el puente que en sentido contrario ocultó la Ermita, la que para peor de males quedará pisada por el Mío.
          Quedan, también, las casas de hacienda que rodean aun la ciudad. Como Cañasgordas, en la actualidad imperdonablemente medio abandonada, Arroyohondo afortunadamente restaurada hace poco, o Sachamate, Pance, Piedragrande o Liverpool bastante bien conservadas. Y por supuesto el Paseo Bolívar y la Plaza de Caicedo, que de parque de pueblo habría que convertir en plaza arborizada. Y no pocos edificios y casas modernos y actuales, que en otras partes serían muy apreciados, que tendríamos que estudiar mas de lo que se ha hecho hasta ahora en las universidades. Todo este pasado, muy presente en nuestra ciudad, es parte de su futuro.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Pasos pompeyanos. 05.02.2015

          Ya los romanos los usaban, como en Pompeya, de donde toman su nombre, para cruzar sus calles sin mancharse con la inmundicia y el barro . Pero ahora y aquí, el que se ha dicho que se hará al final del Paseo Bolívar definitivamente es un paso adelante en esta ciudad sin andenes por donde pasear y ni siquiera caminar. Decir que un semáforo allí causará trancones viales es exagerado aunque por supuesto no existirían nunca si estuviera unido con el anterior y el siguiente, generando por la Avenida 2º Norte una “ola verde”, es decir una serie de semáforos coordinados para permitir el flujo continuo del tránsito rodado sobre varias intersecciones en una misma dirección . Pero mejor seria el hundimiento de la Avenida desde el edificio Las Ceibas hasta el Conservatorio, y prolongar el puente peatonal del CAM hasta donde hoy está la Plazoleta de la caleñidad, ya propuestos por Sara María Giraldo, Heinz von Halle y el autor de esta co...

El estado de la cuestión. 21.02.2024

 Se trata de la base teórica sobre la que se sustenta un escrito, o que se rebate en su desarrollo posterior, y que forma parte del mismo. Pero si bien es lo ético en una columna de opinión, debería ser obligatorio en toda propuesta para la ciudad, lo que no suele suceder en Cali en donde cada cuatro años cada nuevo Gobierno Municipal simplemente ignora las propuestas de los anteriores e improvisa otras. Es lo que ahora hay que evitar en el caso del interés actual por el Centro de la ciudad o la propuesta para el Tren de cercanías, la que primero que todo se debería sustentar en la conformación del Área Metropolitana de la ciudad a partir de la que de hecho ya existe. El Área Metropolitana es la que engloba una ciudad principal (la metrópolis) que le da su nombre, y una serie de ciudades dormitorio, industriales, comerciales o de servicios (Wikipedia). Por eso la de Cali no se debe confundir con la región de ciudades del valle alto del rio Cauca, que se extiende de la Virginia a Sa...

‘La mansión’. 01.07.2020

Los ‘tiempos gloriosos’ de la casa solariega de la aristocrática familia Von Dranitz en el Este de Alemania antes de la Segunda Guerra Mundial, es como Anne Jacobs subtitula a propósito su novela de 2017, pese a que se desarrolla mucho más en los que no lo fueron para nada durante la guerra y después hasta la reunificación de Alemania en 1989. Largos y diferentes tiempos que sin embargo recuerdan siempre ‘La arquitectura del poder’ (como titula Deyan Sudjic su libro de 2005 sobre este tema) comenzando por la portada de la edición en español de ‘La mansión’ que sin querer queriendo muestra un palacete como símbolo de una heredad en lugar de una gran casa señorial en el campo. Además uno de sus personajes, el joven Kacpar Woronsky, es el retrato de la apasionada relación de todo arquitecto que lo sea de verdad con su oficio/arte y sus clientes/mecenas. Hacia “planos, vistas laterales, la perspectiva delantera de un edificio ultramoderno [y] sus ideas eran originales, a veces alocadas, pe...