Ir al contenido principal

Del POT. 27.06.2013


            Ya lo dijo Aristóteles, las ciudades son un número de ciudadanos pero su finalidad es que vivan bien. Hoy en día la calidad de vida en estos grandes y complejos y ya inevitables artefactos,  depende en primer lugar del acertado uso de su suelo, de la eficiencia de su intercomunicación,  del número y calidad de su equipamiento urbano y servicios públicos. Como de una administración con suficiente continuidad y autoridad para que garantice a la gran mayoría de sus habitantes su utilización sostenible, segura, permanente, estimulante y significativa.
            En Cali, lo urgente es controlar el pésimo uso del suelo, muy difícil por ser de propiedad privada, por la nula aplicación del impuesto de plusvalía y por su casi inexistente control. Y mejorar mucho su intercomunicación, la que por supuesto no se soluciona llamándola movilidad y pensándola solo para los carros, y no como un sistema intermodal e integrado, desde el peatón al tren de cercanías, que intercomunicaría todas las ciudades a lo largo del valle del río Cauca, por el que además debería haber transporte de caña y barcos recreativos…como hace un siglo.
            El hecho es que son permanentes las quejas, como la recurrente de Jair LLanos J. con lo que está pasando en el sector del Parque del Amor, cuyos vecinos están desesperados con la bulla de Delirio, que supuestamente cumple con el POT vigente, pero muy por encima de lo aceptable en una zona residencial. Y son de todos los días las quejas por la lentitud del Mio, el despelote de las motos, y el “trancón” por todas partes de la ciudad, sobre todo en el sur; y está por supuesto la carencia generalizada de andenes, aunque lamentablemente pocos se quejen de ello.
            Los usos del  suelo, su intercomunicación, el equipamiento urbano y los servicios públicos, deberían ser objetivo fundamental de un verdadero plan de ordenamiento territorial propuesto por la Alcaldía. Pero debería ser elaborado por reconocidos y experimentados profesionales, conocedores comprobados, por su cultura, estudios, publicaciones y obras, de los diferentes saberes que tienen que ver con las ciudades: Urbanistas, ingenieros, arquitectos, economistas, educadores, y peritos en salud publica, recreación, comercio e industria.
            POT que debería ser aprobado por un Concejo Municipal conformado por ciudadanos  elegidos por los habitantes de los diferentes sectores de la ciudad, no reelegibles, y por delegados por cooptación de los diferentes gremios de los profesionales enumerados arriba; es decir, un Concejo viable de no mas de veinte miembros; y por supuesto los alcaldes si deben ser reelegibles. Puras utopías, claro está, pero entendidas en el sentido que les daría Eduardo Galeano: metas en el horizonte que se alejan a medida que nos acercamos a ellas.
            Mediante el voto en blanco, se podría agregar, pues ha funcionado en otras partes, y es mejor que la protesta, como en estos días en Estambul, Salvador, Rio de Janeiro, Sao Paulo o Brasilia, difícil de controlar para que no caiga en la violencia inútil. Y con el debate académico y participativo en los medios de comunicación, pues equivocadamente en Colombia siguen sin  interesarles las ciudades en tanto ese escenario de la cultura del que habló ya en 1938 Lewis  Mumford, y se ha repetido hasta el aburrimiento en esta columna.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Pasos pompeyanos. 05.02.2015

          Ya los romanos los usaban, como en Pompeya, de donde toman su nombre, para cruzar sus calles sin mancharse con la inmundicia y el barro . Pero ahora y aquí, el que se ha dicho que se hará al final del Paseo Bolívar definitivamente es un paso adelante en esta ciudad sin andenes por donde pasear y ni siquiera caminar. Decir que un semáforo allí causará trancones viales es exagerado aunque por supuesto no existirían nunca si estuviera unido con el anterior y el siguiente, generando por la Avenida 2º Norte una “ola verde”, es decir una serie de semáforos coordinados para permitir el flujo continuo del tránsito rodado sobre varias intersecciones en una misma dirección . Pero mejor seria el hundimiento de la Avenida desde el edificio Las Ceibas hasta el Conservatorio, y prolongar el puente peatonal del CAM hasta donde hoy está la Plazoleta de la caleñidad, ya propuestos por Sara María Giraldo, Heinz von Halle y el autor de esta columna en el concurso para la Manzana T´ y re

Equilibrio. 03.06.2020

En la medida en que se hace necesario prolongar el aislamiento es preciso, además de las nuevas excepciones, que se corrijan algunos desaciertos ya señalados en los medios por columnas de opinión, entrevistas e información al respecto, y considerar que la situación es diferente en cada población del país, como lo es la de muchos municipios a los que no ha llegado la pandemia y por tanto la única medida a tomar es impedirlo controlando la entrada y salida de sus habitantes. Que la información que se suministre sea completa, pertinente y debidamente documentada (y no datos inconexos que generan alarma a base de exageraciones) para que sea útil al poder compararla con la de otros países, especialmente con los que se comparten aspectos geográficos, económicos, sociales, culturales y étnicos, como Panamá, Venezuela o Ecuador de los que a excepción de lo de Guayaquil muy poco se ha informado, y casi nada del pertinente ejemplo de Costa Rica. No se ha entendido que a los adultos mayores, sano

La montaña rusa. 27.09.2001

Si; se trata de la ampliación de la Avenida de Circunvalación: una obra sin lugar a dudas torcida. ¿Es que nadie se da cuenta? Curvas que se pegan a otras curvas, en fuerte pendiente. Allí se ignoraron las mas elementales normas del diseño vial. Sus carriles desaparecen o se estrechan como si los carros fueran de caucho. Calzadas para tres carros y medio... como si   fuéramos tontos. ¿Lo somos? Por supuesto su pavimento variopinta, remendado y discontinuo no es lo de menos: ilustra la mentalidad de sus gestores, diseñadores, constructores e interventores. Y la de la opinión pública en Cali que solo se preocupa (los que se preocupan) de que este nuevo esperpento no esté ya terminado.           Para hacer semejante adefesio, financiado, junto con sus inevitables serruchos, con el dinero de los contribuyentes, se talaron muchos árboles del Parque del Acueducto, incluyendo la palma abrazada por la ceiba, y nunca se supo que pasó con los que supuestamente se trasplantaron. Con permiso d