Ir al contenido principal

Mirémonos bien. 24.07.2008

La mayoría de los alcaldes, concejales, funcionarios y lideres cívicos, que han intervenido en el espacio público de Cali en las ultimas décadas, no han sabido mirarlo. Su insensibilidad visual y espacial, y su falta de conocimientos en el tema, es lamentable. No entienden que la belleza y gracia de una ciudad es fundamental para la calidad de vida en ella. Ni, menos aun, que está debería ser su principal preocupación. Miopemente creen que es un lujo al que después se puede acceder, o que solo es un problema de decoración, que ni siquiera es refinada, y no, por lo contrario, un punto de partida. Igual que nuestros muy recientes ciudadanos, que necesitan con urgencia educación cívica y urbana y no apenas la formal, nuestros dirigentes precisan de formación estética y cultural, y no solo gerencial. Eso les ayudaría a ver que la verdadera democracia no es apenas la política sino y sobre todo la cultural. La que permite que la gran mayoría de los habitantes de una ciudad convivan pacifica y estimulantemente al acceder a ella en tanto que una obra de arte colectivo.
Nuestros políticos y dirigentes pretenden ocuparse de la ciudad pero no saben ver que son las proporciones de sus distintas partes, entre sí y en relación al conjunto, lo que les confiere gracia y belleza a sus calles, avenidas, plazas y parques. Eso que tanto admiramos cuando viajamos pero que esquizofrénicamente no echamos de menos aquí. ¿Cómo explicar de otra forma tanta fealdad cometida en Cali? Desde los puentes peatonales (incompletos por lo demás pues precisarían de ascensores para los que mas los necesitan), que se atraviesan en la Avenida Colombia en la perspectiva hacia la Ermita, hasta las invasoras estaciones del Mío en la Calle Quinta, con su ostentosa abundancia de costosísimos materiales. Para no hablar de los puentes vehiculares que destrozan sin necesidad el espacio urbano de nuestras calles y avenidas, pues casi todos se hubieran podido reemplazar por discretos semáforos debidamente sincronizados, como en todas las ciudades civilizadas del mundo, lo que de contera habría vuelto innecesarios la mayoría de los puentes peatonales.
          Decía el arquitecto y teórico ingles James Gibbs (1682-1754), que: “No son ni la riqueza o abundancia de los materiales empleados ni la diversidad de las líneas ni el carácter ostentoso del acabado lo que confieren gracia y belleza a un edificio sino las proporciones de las distintas partes entre sí y en relación al conjunto, sea este absolutamente sobrio o esté decorado con algunos refinados adornos” (Varios: Teoría de la arquitectura, del Renacimiento a la actualidad, 2003). Se comprueba con la belleza y gracia de nuestras ciudades coloniales, cuya arquitectura es exquisita en lo que respecta a la relación y proporciones del conjunto con sus distintas partes y de estas entre sí, pero cuya precisión en su ejecución no es la mejor. Desde la sobriedad de la mayoría de los ejemplos conservados aquí, como la iglesia de la Merced, hasta la Torre Mudéjar con su profusa ornamentación de “losanges” (rombos de cerámica). Repetimos como loras la belleza de Cali pero poco vemos los esperpentos que le estamos haciendo, y de ahí que no nos importen sus graves consecuencias.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Pasos pompeyanos. 05.02.2015

          Ya los romanos los usaban, como en Pompeya, de donde toman su nombre, para cruzar sus calles sin mancharse con la inmundicia y el barro . Pero ahora y aquí, el que se ha dicho que se hará al final del Paseo Bolívar definitivamente es un paso adelante en esta ciudad sin andenes por donde pasear y ni siquiera caminar. Decir que un semáforo allí causará trancones viales es exagerado aunque por supuesto no existirían nunca si estuviera unido con el anterior y el siguiente, generando por la Avenida 2º Norte una “ola verde”, es decir una serie de semáforos coordinados para permitir el flujo continuo del tránsito rodado sobre varias intersecciones en una misma dirección . Pero mejor seria el hundimiento de la Avenida desde el edificio Las Ceibas hasta el Conservatorio, y prolongar el puente peatonal del CAM hasta donde hoy está la Plazoleta de la caleñidad, ya propuestos por Sara María Giraldo, Heinz von Halle y el autor de esta co...

El estado de la cuestión. 21.02.2024

 Se trata de la base teórica sobre la que se sustenta un escrito, o que se rebate en su desarrollo posterior, y que forma parte del mismo. Pero si bien es lo ético en una columna de opinión, debería ser obligatorio en toda propuesta para la ciudad, lo que no suele suceder en Cali en donde cada cuatro años cada nuevo Gobierno Municipal simplemente ignora las propuestas de los anteriores e improvisa otras. Es lo que ahora hay que evitar en el caso del interés actual por el Centro de la ciudad o la propuesta para el Tren de cercanías, la que primero que todo se debería sustentar en la conformación del Área Metropolitana de la ciudad a partir de la que de hecho ya existe. El Área Metropolitana es la que engloba una ciudad principal (la metrópolis) que le da su nombre, y una serie de ciudades dormitorio, industriales, comerciales o de servicios (Wikipedia). Por eso la de Cali no se debe confundir con la región de ciudades del valle alto del rio Cauca, que se extiende de la Virginia a Sa...

‘La mansión’. 01.07.2020

Los ‘tiempos gloriosos’ de la casa solariega de la aristocrática familia Von Dranitz en el Este de Alemania antes de la Segunda Guerra Mundial, es como Anne Jacobs subtitula a propósito su novela de 2017, pese a que se desarrolla mucho más en los que no lo fueron para nada durante la guerra y después hasta la reunificación de Alemania en 1989. Largos y diferentes tiempos que sin embargo recuerdan siempre ‘La arquitectura del poder’ (como titula Deyan Sudjic su libro de 2005 sobre este tema) comenzando por la portada de la edición en español de ‘La mansión’ que sin querer queriendo muestra un palacete como símbolo de una heredad en lugar de una gran casa señorial en el campo. Además uno de sus personajes, el joven Kacpar Woronsky, es el retrato de la apasionada relación de todo arquitecto que lo sea de verdad con su oficio/arte y sus clientes/mecenas. Hacia “planos, vistas laterales, la perspectiva delantera de un edificio ultramoderno [y] sus ideas eran originales, a veces alocadas, pe...